Trece Certámenes Internacionales de Grabado en España
Las exposiciones internacionales de grabado se dividen en varias categorías de acuerdo a su periodicidad o regularidad pero hay dos subcategorías que contemplar según los límites de los tamaños admitidos: los de tamaño normal, desde 20x30 cts. hasta 150x200 cts. y los de pequeño formato, generalmente desde el tamaño de un Ex Libris hasta 15 x 20 cm, los que no hay que despreciar ya que los mejores grabados de Goya, los Desastres de la Guerra (realizados entre 1810 y 1815) y los Caprichos fueron ejecutados más o menos dentro de estos formatos sin contar los 442 aguafuertes realizados por Rembrandt. Sin embargo, estas Exposiciones Internacionales de Grabado de Pequeño Formato proliferan en todo el mundo dadas las facilidades de organización, envío y montaje. De todas ellas hay que destacar la Exposición Internacional de Mini Grabados de Cadaqués del Taller/Galería de Pascual Fort de Barcelona porque fue la primera en su género en durar 3 décadas enteras, fue fundada en 1981 y desde entonces viene realizándose todos los años de forma ininterrumpida. Además de la exposición principal en Cadaqués realiza muestras itinerantes por muchas ciudades catalanas y a veces tanto en países europeos vecinos como extranjeros. De todos los países que realizan exposiciones colectivas internacionales, tanto del hemisferio Occidental como del Oriental, es España el país que se destaca sobremanera por la cantidad de eventos. En total, se llevan a cabo nueve certámenes anuales y cuatro Bienales de forma periódica y regular, solo en el país gallego se realizan tres :
En el país vasco inclusive se estrenó este año un Festival de Grabado de carácter anual:
F. de Goya 1810 "Los Caprichos" Punta seca Aguafuerte 17,8 x 22 cm
La fuerte tradición gráfica española fue creada sobre todo por el aporte de Francisco de Goya y Lucientes con los aguafuertes de los Desastres de la Guerra (82 estampas sobre la guerra de la Independencia española)) y los Caprichos (80 ejemplares) y por los estudios grabados al buril de la Guernica y el gran aguafuerte La Minotauromaquia (comenzada el 23 de Marzo de 1935) de Pablo Picasso (1881-1973) inspirada en La Tauromaquia, serie de litografías de Goya. estas obras son consideradas verdaderos hitos en la Historia del Grabado Contemporáneo. Estos emblemáticos grabadores contribuyeron a la investigación del Grabado al combinar diversas técnicas en una sola plancha de metal predominando el aguafuerte. Al grabado producto de estas combinaciones se le denomina hoy en día Intaglio que, a diferencia del grabado en madera, siempre ha requerido de una máquina de impresión especial o prensa, llamada tórculo. Hay autores que atribuyen el origen del Aguafuerte al Nielli y al Bulino (arte del Buril) en Europa, que eran técnicas de talleres de orfebrería medievales mediante las cuales se producían incisiones en metales para posteriormente ser rellenas con diferentes betunes grasos pigmentados a fin de decorar armas, joyas, emblemas, escudos y armaduras. Esta forma de grabar en metal podía ser directa, con herramientas especiales llamadas punzones, hoy en día Buriles, o indirecta, por medio de ácidos corrosivos. Esta técnica, en el grabado en metal actual, requiere de gran prolijidad y pericia en su ejecución por cuanto se emplean ácidos relativamente fuertes y altamente tóxicos (percloruro de fierro, nítrico y/ o clorhídrico diluidos en agua de acuerdo a las necesidades de la intensidad corrosiva) que pueden malograr fácilmente los resultados, como se puede apreciar en la reproducción adjunta de uno de Los Desastres donde, aparentemente, el ácido levantó la cera y mordió de manera uniforme el trazado de las líneas produciendo manchas grises oscuras en vez de trazos negros (punto de vista técnico). Otra posibilidad de esta falta de prolijidad es que Goya mismo no haya tenido la paciencia de someter la plancha de metal a mordidas sucesivas de ácido para lograr un tramado de líneas, o achurado, y así un negro limpio y profundo; la urgencia por expresarse no se lo habría permitido (punto de vista creativo). Algunos autores lo atribuyen a la falta de materiales adecuados de la época (punto de vista histórico). Lo más probable es que se hayan conjugado todas estas posibilidades a la vez. Sea cuales fueren la razones, no menoscaban en absoluto el valor plástico y expresivo del resultado final.
Pablo Picasso 1935 "La Minotauromaquia" Aguafuerte 49,8 x 69,3 cm
En los Caprichos de Goya se puede apreciar el raspado mismo como recurso para producir grises livianos y el arduo uso de la aguatinta o granitura que a veces es bruñida de manera incompleta para producir los mismos efectos. Picasso por su parte realizó numerosos estudios al buril de las figuras humanas y los caballos para su Guernica derivados de los dibujos de caballos agónicos corneados en la plaza de toros del pintor impresionista vasco de principios del siglo pasado Don Dario de Regoyos en su Libro Negro de España. Se cuenta que Dario de Regoyos hizo una sola exposición en vida en Paris en 1906 donde trabajó casi toda su existencia. A esa exposición asistió un joven pintor que fue el último en irse y que se quedó hasta muy tarde y que era Pablo Picasso demostrando así una gran reverencia por lo que había visto lo que evidencia su total aceptación y plena admiración por el trabajo de Regoyos. Y no fue el único al que admiró. Fuera de su talento genial Picasso tuvo la gran habilidad, no exenta de una gran humildad, como ninguno, de derivar elementos de imágenes de sus contemporáneos con gran facilidad (para no mencionar culturas antiguas, primitivas o civilizadas, como lo demuestra la pintura Les Demoiselles d´Avignon ( 1907) del Museo de Arte Moderno de Nueva York con fuerte y evidente influencia de esculturas africanas, muy de moda en esa época en Paris), eso sí, los superó largamente desarrollando esas ideas ajenas al máximo. Por lo general, en la jerga popular se usa la palabra “copiar” pero el efecto peyorativo que esta voz produce por su connotación irreverente, induce a prejuicios, los que a su vez impiden conocer y entender el fenómeno mismo de la derivación, fundamentación o basamento que echa por tierra el mito de que “robar es malo”, en arte, por lo menos. Esta capacidad de ir más allá con las ideas de sus congéneres de profesión fue precisamente uno de los factores que le ayudó a trascender el arte plástico de su época y modernizarlo. En grabado, combinó punta seca con aguafuerte y con aguatintas y todo lo que le permitiera libertad de ejecución y espontaneidad inclusive usando la punta del raspador a la manera de una gran puntaseca como es el caso de la Minotauromaquia. A esta breve enumeración de grabadores españoles hay que agregar al catalán Salvador Dalí productor de grandes cantidades de aguafuertes y autor de una de las primeras grandes polémicas y debates de las Artes Gráficas que aún subsiste y es una antecesora de la debacle actual, bastante similar, producida por lo que se denomina hoy en día giclee. Se le atribuye a Dalí haber autorizado reproducir en técnicas offset una gran cantidad de aguafuertes que luego fueron pasados por la prensa de huecograbado sobre planchas de metal del mismo tamaño de la imagen para imprimir el relieve del borde y así poder fingirlos como grabados originales y auténticos con el propósito de saturar y dominar el mercado de las artes gráficas de su época. Las ediciones fueron de grandes tirajes superando a veces los 100 ejemplares y es dudoso que aguafuerte alguno resista, sin sufrir deformaciones, tantas impresiones a menos que la plancha de metal haya sido cromada lo que no fue el caso. Por otra parte, todos los ejemplares fueron firmados por Dalí. Tanto el Offset y las impresiones digitales son métodos de reproducción y comunicación masivos que por sus características de tirajes o ediciones prácticamente ilimitadas, las hace muy atractivas para algunos grabadores. Su validez o autenticidad como recursos plásticos viables o valederos aún están en discusión pero se echan de menos definiciones que permitan ordenar la caótica confusión reinante producida por el impacto de las nuevas tecnologías digitales o computacionales en las artes gráficas. No se puede dejar de citar a esos otros dos catalanes, Joan Miró y Antoni Tapies que investigaron todos los métodos y técnicas de las artes gráficas sobresaliendo por sus litografías a colores y su experimentación con fuertes altorrelieves o embossements que llegaron a romper los papeles de grueso gramaje usados. Todos ellos contribuyeron con sus investigaciones técnicas y formales a lo que hoy en día aceptamos como Grabado Contemporáneo.
Esta cantidad de concursos y muestras internacionales, a las que va ha haber que sumar muchas de otros países además de las Trienales mundiales de grabado, y que, todas juntas, más que duplican las de España, viene a demostrar que sí algún grabador chileno pretende concursar en varias de ellas, ya sea por los premios o solo por el reconocimiento de que sus trabajos sean seleccionados, colgados en la exposición final y reproducidos en los catálogos emitidos, no se va a poder contentar con producir ediciones de tirajes limitados sino que habrá de imprimir reales ediciones de 20 a 30 ejemplares, como mínimo. Así pues, a trabajar que el universo del Grabado y las Artes Gráficas sigue creciendo y expandiendose a gran velocidad.
Además de los concursos españoles arriba mencionados hay que incluir los siguientes
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- Victor Femenías von Willigmann